Ha sido el profesor Ingo Rechenberg, del Departamento de Biónica y Técnicas Evolutivas de la Universidad Técnica de Berlín, quien encontró esta curiosa araña, de noche, cuando patrullaba las dunas con un foco en busca de nuevas especies de insectos. La araña rodó frente a la luz con la que exploraba el desierto.
Además parece ser que este arácnido viaja únicamente de noche y se esconde en su propia red bajo la arena cuando el sol asoma por el horizonte.
La araña toma carrerilla antes de ponerse a girar como una diminuta rueda y apoyándose únicamente en tres de sus ocho patas, esta posición le permite alcanzar una velocidad de 2 m/seg., o lo que es lo mismo, 7,2 kilómetros por hora.
Rechenberg tiene la hipótesis de que la araña utiliza esta forma de transportarse para ahorrar energía, mientras que el doctor Peter Jäger considera que podría ser más un mecanismo de defensa, una forma de huir ante los enemigos. En este sentido, este experto en arácnidos apunta que rodar de esa forma debe agotar a la araña, hasta el punto que muere por agotamiento.
Una vez que tenga datos suficientes, Rechenberg tratará de diseñar un robot que copie la forma de transportarse de la araña, muy útil, para un terreno “suave y plano” como son las dunas del desierto. Esta araña tiene la ventaja de que puede trepar y caminar como el resto de los animales y además rodar cuando la ruta se vuelve complicada. El desarrollo de un sistema similar podría ser seguramente interesante para una misión a Marte según considera Rechenberg, que especula sobre la posibilidad de diseñar un vehículo biónico que pueda tanto arrastrarse por un terreno abrupto como rodar cuando las condiciones le permitan, lo que, al mismo tiempo, serviría para ahorrar o incluso recobrar -mediante una sencilla dinamo- energía.
Los experimentos de Rechenberg podrían confirmar la teoría del doctor Jäger, ya que el científico alemán provocó la muerte de una de estas arañas después de estar persiguiéndola hasta la salida del sol con una videocámara con la que grabó el comportamiento del arácnido.
Rechenberg se llevó a Alemania dos especímenes, uno macho que se conserva en los laboratorios de Jäger y otro, al que bautizó como Ariadna, que vive en su casa.
Cebrennus rechenbergi será el nombre científico que recibirá esta araña si se confirma que es una nueva especie.
2 comentarios:
Hola biobotanic, en primer lugar te voy a dar la enorabuena por la matrícula que has sacado en flora y vegetación de españa, que envidia!!..jeje y sobre al artículo (que me parece muy interesante) diré que la velocidad que alcanza esta araña no es "normal", yo creo que es la Bolt de las arañas. Es curioso ver dos puntos de vista tan "antónimos" para esplicar el mismo comportamiento, el de rodar por las dunas. Un científico opina que puede ser para ahorrar enrgía y el otro opina todo lo contrário. En cuanto a lo del vehículo biónico, todod sabemos que el "plagio" a la naturaleza nos oersigue desde adán y eva (si darwin levantara la cabeza) pero hay una cosa que me ha parecido muy mal, graso error para un científico y cuyas consecuencias podemos pagar todos en un futuro que es el traerse a dos ejemplares a Europa. A ver quién le esplica a este tonto del ava como se "forjan" las especies invasoras.
Muchasssss gracias por tu felicitacion por la matricula,flora y vegetacion de españa ha sido mi asignatura favorita este año.
Y respecto al articulo te diré que creo que estos cientificos tomarán las medidas adecuadas para que no se produzca una invasion de arañas veloces y despalcen a nuestras arañas europeas ,jejejejeje.
Blogger de santa biologia,Chaoooooooo,
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